Después de más de 30 horas en el bus de Falcon Air, aguantando los trapicheos de los conductores y la tripulación y sus doscientas mil paradas, llegamos anoche a las 12 a Dar es Salaam.
Una vez en el hotel, me asusté un poco, porque tenía los pies hichados como dos botos de vino, a Jescar le pasaba lo mismo, pero menos.
Me dijo que era normal, después de tantas horas sentados. Vinimos bastante bien, dentro de lo que cabe, en la segunda fila de asientos del lado izquierdo, pero el mío estaba roto y no se podia tumbar, asi que en plan rígido todo el viaje. Los trámites de la aduana de Tanzania fueron rápidos, y con una visa transit de 30 euros continuamos viaje.
Venía un poco preocupado, porque como el lunes me habia tomado la medicación para la malaria y hace sus efectos…, tenía la tripa un poco suelta, que decía Sancho Panza, y tuve que entrar en las letrinas de Nakonde, no aptas para escrupulosos, pero todo se solucionó a base de plátanos.
Me debo de estar engordando, porque vamos todo el día en un pienso, comprando las cosas que ofrecen en las paradas. Los cacahutes cocidos con sal, están muy buenos y los tostados son muy sabrosos. Los anacardos tostados igualmente , y son muy abundantes y baratos, asi como los plátanos asados, el maiz tierno, idem, y el pollo a la brasa.
El pollo merece mención aparte, porque es como comer perdiz, sabrosísimo, aunque un poco duro. También venden pinchos morunos de carne de vaca, muy ricos y mi plato preferido que es el samaki.
El samaki es pescado de agua dulce. El mejor es la perca del Nilo. Lo fríen en abundante aceite de palma, muy caliente, durante bastante tiempo y como se queda tostadito te puedes comer hasta las espinas crujientes.
Esta mañana, con los pies ya mejor, hemos alquilado un pika pika con conductor y nos hemos dado una vuelta por Dar, hasta el mercado de artesanos, donde hay una pequeña ciudad de la artesania.
Jescar ha hecho un pedido de cosas que nos traerán al hotel: peines de madera, abrecartas, pendientes, máscaras, morteros, etc. a unos precios bastante buenos, que revenderemos en el mercado de Sigüenza esta primavera.
Tenemos los billetes para Nairobi (Kenia), iremos por la frontera de Arusha, que es la vía más rápida, en un tirón de diez o doce horas.
En Nairobi queremos ir al mercado principal, que es el sábado, el viernes aprovecharemos para ver a Reagan y el domingo estaremos camino de Busia, completando asi la vuelta al lago Victoria.
Dejamos ésto, porque nos está esperando un plato de cerdo refrito, con abundantes especias y patatas fritas, que hay que comer a mano, para chuparse los dedos…
Vaya paliza que os estais dando!! La semana que viene será mas tranquila, no? Creo que a la vuelta vas a necesitar otra semana para recuperarte, jaja. Muchos besossssssss
Vaya aventura! pero tu estoy seguro que lo estas disfrutando mas que un (“piiip”) con lombrices.
¡Ha! ten cuidado no te den, (mal pensado) me refiero al refran tan nuestro, “gato por liebre”, jojo,jojo,jojo (Mucha mierda chaval)
leer esta descripcion que haces sobre las comidas tipicas de la zona a las 12.14 de la mañana, abre el apetito a un santo!
me alegro que pese a las incomodidades vuestro viaje este saliendo estupendo y sobre todo que tu lo estes disfrutando.
Deseando ver esas buenisimas fotos que seguro estas haciendo
un gran abrazo y animooo
pues nada Fernando,cuando vuelvas te vas a venir a correr al parque conmigo para bajar el cerdo , el pollo, los anacardos ,los cacahuetes,platanos y todo lo bueno q te estas metiendo entre pecho y espalda.un abrazo desde mañolandia.
meparece quelo bueno se hacaba no se cuando vuelves pero el tren del doncel os espera apartir del dia 6 demarzo cotamos convosotros besos recuerdos para todos ana